viernes, 9 de septiembre de 2011

Cómo entremés o pasante no hay nada mejor que una Gougère



Los franceses, que algo saben de preparar cosas ricas inventaron hace muchos años esta especie de pancitos inflados. Ellos son hechos en el horno y utilizando como ingredientes harina, leche, agua, huevos y queso rallado. Su sabor y textura hacen que los comensales quieran más, y más y más! Acompañarlos con vino tinto, blanco, rosado o con cocteles.
Son relativamente fáciles de hacer con un poco de paciencia y seguro que más de uno les pedirá la receta. La que comparto a continuación con los lectores.

Ingredientes: (para hacer unos 25 gougère) :
½ taza de Leche
½ taza de Agua
100 gramos de Manteca (mantequilla) sin sal
1 taza de Harina OOOO (o de harina cernida)
4 Huevos grandes y a temperatura ambiente
100 gramos de Queso Gruyere o de Queso Suizo rallado grueso
Sal y Pimienta al gusto
1 pizca de Nuez Moscada (Opcional)
Preparación:
Precalentar el horno a 225º centígrados (450º Fahrenheit). Engrasar ligeramente la bandeja en la que se cocinarán los pancitos o alternativamente y si se dispone de ella, ponerle una hoja de silicona de las especiales para el horno.

Poner a fuego alto una olla o recipiente, agregarle la manteca, el agua, la leche, la sal, la pimienta y la nuez moscada. Cuando empiecen a hervir, agregar de una vez toda la harina, bajar el fuego a medio bajo y revolver la mezcla con una cuchara de madera, hasta que esta se junte y forme una especie de masa; continuar revolviendo con fuerza uno o dos minutos adicionales, hasta que la masa esté muy suave.

Pasar la masa a un recipiente, dejarla descansar un minuto y a continuación, agregar los huevos uno a uno, batiendo continuamente, con una cuchara de madera, hasta tener una masa espesa y lustrosa, asegurándose que cada huevo ha sido incorporado totalmente antes de agregar el próximo. Una vez que los huevos han sido incorporados, agregar el queso rallado a la masa. Si se dispone de una batidora potente, este parte del proceso (agregar los huevos y el queso) puede hacerse utilizando la paleta para revolver.

A continuación y con una cuchara sopera ir formando porciones pequeñas que se trasladan a la bandeja preparada para ir al horno. Llevar la bandeja el horno, bajar la temperatura a 200º Centígrados (400º Fahrenheit). Dejar cocinar unos 12 minutos; a continuación dar vuelta a la bandeja, pasando para delante la parte que estaba atrás y viceversa, y cocinar hasta que todos los pancitos estén dorados.

Dejar enfriar un poco y consumir. 


4 comentarios:

  1. Uyyyy! Se lee riquísimo y me los imagino calientitos con una taza de café y se me hace agua la boca.
    Que el pan engorda es una mentira, el pan no engorda... el que engorda es el que se lo come. jaja. Muy buen receta Alvaron, Gracias.

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  2. Estos pancitos son adictivos! No se pueden parar de comer.

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  3. Espero que los disfruten, como los disfrutamos nosotros (y nuestros invitados) cuando los hacemos!

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  4. Hasta que me decidí a seguirte, así el compu me avisa de tus nuevos posteos; que por cierto siempre están llenos de tentaciones.
    Me atrevo a dejarte planteada una idea. y que tal si intentas dejar un listado de tus preparaciones a un costado.
    Esta última, sin el queso es similar a la masa de unas albndiguitas rellenas con ciruelas descarozadas o damascos ide, cocidas en agua y luego espolvoreadas con azúcar en polvo y nueces molidas o semillas de amapola clásicas de la cocina hungara (gomboc, eso es albóndigas), alemana y por ahí.
    Un abrazo!

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